Foto: Gustavo Torres (NotiPress/Composición)
Durante la presentación del estudio Reimaginando el futuro de la productividad en el sector público, se destacó un dato crítico: únicamente el 10% de las entidades gubernamentales iniciaron procesos de modernización tecnológica. La información fue compartida por Mario Ulloa, especialista en desarrollo de negocios para SAS LATAM, durante un evento en el que NotiPress tuvo acceso.
También, el diagnóstico expuesto revela una desconexión entre las expectativas ciudadanas y la capacidad operativa institucional. "El 20% de la fuerza laboral a nivel mundial está en el sector público, con bajo nivel de educación digital y una actitud de servicio bastante limitada", expresó Ulloa durante su intervención. Este panorama se contrapone al auge del consumismo instantáneo, donde la población exige respuestas inmediatas y procesos eficientes.
Uno de los ejemplos señalados por el especialista ilustra esa brecha entre lo digital y lo físico en los trámites gubernamentales. Se mencionó el caso de una carta apostillada que, pese a ser generada digitalmente, requiere una cita presencial para su validación en papel. Este tipo de prácticas contradicen la lógica de automatización esperada por los usuarios y evidencian cuellos de botella administrativos que ralentizan los servicios públicos.
Mario Ulloa enfatizó también la falta de avances estructurales: "El 80% de las organizaciones gubernamentales se encuentran en las etapas tempranas de madurez digital". Este rezago dificulta no solo la adopción de inteligencia artificial, sino también la gestión integral de datos, elemento considerado esencial para cualquier estrategia de transformación tecnológica.
En este contexto, el impacto potencial de soluciones tecnológicas queda limitado si no se resuelve primero la dispersión de datos y la falta de interoperabilidad. Los sistemas públicos no logran vincular bases como actas, CURP, licencias o historiales clínicos, lo que impide una atención personalizada oportuna. Según explicó Ulloa, "todo esto implica rediseñar la forma en la que se va a hacer el trabajo".
Así, este entorno presenta un desafío urgente. Las plataformas digitales representan una vía viable para modernizar los procesos, siempre que se respalden por una estandarización adecuada de los datos y una integración de sistemas. El informe, además de destacar los bajos niveles de adopción tecnológica, indica la necesidad de cambiar estructuras internas para facilitar la implementación de estas herramientas.
Una transformación digital en el sector público no solo depende de infraestructura, sino también de decisiones estratégicas. El rediseño de procedimientos, la capacitación del personal y la implementación de plataformas interoperables son aspectos señalados en el estudio como necesarios para mejorar la productividad institucional y responder a las exigencias de una sociedad digitalizada.
DESCARGA LA NOTA SÍGUENOS EN GOOGLE NEWS
